¿Quién no soñó alguna vez con defender la celeste y blanca en un mundial? En apenas unas semanas, ocho chicos de San Luis harán realidad este sueño en la RoboCup 2016 - Leipzig, Alemania: la competencia de robótica más importante del calendario internacional.

Del 30 de junio al 4 de julio, los alumnos que se forman habitualmente en los talleres de robótica que la Universidad de La Punta (ULP) dicta en San Luis, Villa Mercedes y Merlo, se enfrentarán a las mejores delegaciones del mundo como únicos representantes de la Argentina.

Por estos días, los dos equipos ultiman detalles de los robots con los que buscarán consagrarse en las categorías Rescue Line (rescate de línea) y Rescue Maze (rescate en laberinto). Pero, ¿cómo viven ellos los momentos previos a la competencia? ¿Cuáles son sus expectativas y qué sienten al saber que serán los únicos en vestir los colores nacionales en Alemania?

Ezequiel Córdoba (17) y Lucas Orozco (18) son dos de los integrantes de “Iron Fénix Team”, el equipo que competirá en la categoría Maze. Si bien no será su primera vez en este certamen internacional, los chicos apuestan a dejar todo en la edición 2016.

“Siento emoción y, al mismo tiempo, mucha responsabilidad. En esta competencia se demuestra el trabajo en equipo, la inteligencia, la rapidez para resolver problemas pero, también, se comparten conocimientos. El desafío está en hacer mucho con poco”, aseguró Ezequiel, alumno de la Escuela Nº 4 “Fray Luis Beltrán” de la capital puntana, quien participa de los talleres de la ULP desde los 12 años.

Al igual que Ezequiel, Lucas considera que el trabajo en equipo es clave para conseguir un lugar en el podio mayor. “Por más que tengamos formas de ser distintas, al momento de competir y enfocarnos en el robot para resolver un conflicto, somos todos uno”, afirmó el joven mecánico del grupo, quien estudia Ingeniería Electrónica y, a raíz de su participación en Robótica ULP, dicta clases en un taller extracurricular del Colegio Don Bosco.

El menor de los hermanos Córdoba, históricos participantes de la RoboCup, tiene a su cargo la programación del robot aunque también se anima a meter mano en la electrónica. Sobre la experiencia que está próximo a vivir, afirmó: “Con los chicos compartimos muchas horas juntos. Va a ser lindo vivir este viaje con un equipo tan consolidado. Vamos a dar lo mejor de cada uno de nosotros, para representar a nuestra provincia como se lo merece”.

A menos de un mes de viajar a Alemania y con las horas de sueño contadas, los chicos de Iron Fénix Team ajustan sensores, prueban nuevos obstáculos y dan los retoques finales a la programación. “Poder participar de la RoboCup es un mérito que alcanzamos con mucho esfuerzo, tiempo y dedicación. Nunca imaginé que iba a representar a mi país en una competencia así. Sólo sé que estuve en el momento y en el lugar exacto, se me dio una gran oportunidad y la supe aprovechar”.