FINAL NACIONAL
Lunes, 03 Noviembre de 2014
Compañerismo, creatividad y pasión, los secretos de San Luis en la Roboliga
Los estudiantes puntanos viajaron a Buenos Aires en busca de ser protagonistas de la final nacional de la Roboliga y, sin dudas, lo lograron. Durante la competencia los chicos además de desplegar todo el conocimiento adquirido en robótica, dieron un ejemplo de solidaridad, compañerismo y superación.
Compañerismo, creatividad y pasión, los secretos de San Luis en la Roboliga La delegación puntana estaba lista para demostrarle al país su poderío en robótica.

El viernes pasado se disputó la final nacional de la Roboliga 2014, en Buenos Aires, y la delegación encargada de representar a San Luis tuvo una performance más que destacada. Además de ganar cada una de las categorías en las que participaron, los chicos dieron una muestra de cómo el compañerismo, la creatividad y las ganas de superarse, pueden ser el secreto del éxito.

Desazón, lágrimas, solidaridad y festejo

Durante el certamen, los chicos de Iron Fénix Team, uno de los equipos que representó a San Luis en la categoría Olimpíadas, tuvieron que afrontar diferentes inconvenientes y sobreponerse a los mismos para abrazarse a la gloria. Minutos antes de salir a las arenas de competencia en Rescatando al robot Ryan, el robot sufrió el daño de la placa (cerebro) y quedó fuera del certamen nacional.

Todo el trabajo desarrollado durante meses en el taller de robótica de San Luis se vio opacado por un problema mecánico poco usual, que afectó el funcionamiento total del robot de Iron Fénix Team. “La verdad que no podíamos creerlo. En la última prueba antes de competir se quemó el micro controlador de la placa y quedamos sin saber qué hacer. Nos dio mucha bronca y angustia no poder demostrar lo bien que funcionaba nuestro robot”, indicó Lucas Orozco, mecánico del equipo.

Pero tal como se les inculca a los chicos durante los talleres, quedarse de brazos cruzados no sirve de nada. Mientras la competencia transcurría, Lucas, junto a sus compañeros Andrés y Ezequiel Córdoba, incentivados por el compromiso y la pasión por la robótica, intentaron crear un robot desde cero, pero los tiempos no se lo permitieron.

Allí, cuando las lágrimas comenzaron a adueñarse de la situación, los alumnos del Instituto Santo Tomás de Aquino, que estaban a punto de finalizar su exposición en la categoría Feria de Proyectos, tuvieron un emotivo gesto que revivió la ilusión del equipo puntano.

“Cuando les contamos a los chicos del Santo Tomás el problema que habíamos tenido, automáticamente nos dijeron que nos prestaban el robot de ellos. Fue un gran gesto de su parte. Sin perder tiempo le hicimos un par de modificaciones, lo adaptamos para poder competir en la categoría colaborativa y en conjunto con un equipo de Buenos Aires con el que nos tocó trabajar por sorteo, obtuvimos el 2º puesto”, expresó Lucas, tras obtener un trofeo que cuidará y tendrá presente, siempre.

Finalmente, el joven aseguró que estos triunfos son los que más se disfrutan: “Fue un difícil momento el que nos tocó pasar, pero lo importante es que con trabajo en equipo pudimos sobreponernos y obtener buenos resultados para nuestra provincia”.



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